Hombres: debemos cuidar nuestro miembro. Aunque todas las partes de nuestro cuerpo son importantes, esa parte tiene un significado especial: desde orinar hasta llevarnos al cielo, es el pináculo de la vida, el obelisco de nuestro ser.
Para facilitar la tarea de cuidarlo, aquí te traemos 7 hábitos que dañan la salud de tu gran amigo y cómo cuidarlo: verás cómo hay cosas que simplemente no sabías que te hacían daño.
1.- Corazón malo, miembro peor
Como tal vez ya sepas, tu aparato se levanta mediante el flujo de sangre que va hacia él: si la sangre no pasa hacia allá…pues simplemente no hará nada. Es por eso que debes hacer ejercicio y cuidar tu alimentación, pues un corazón sano y arterias destapadas ayudarán a que sea funciona; de otra manera te arriesgas a la disfunción.
2.- Mala alimentación
Ligado a la recomendación anterior, la salud de tu corazón y como fluye la sangre depende no solo del ejercicio sino de una buena alimentación. Comer en forma saludable evitará la disfunción de tu miembro; súmale a tu dieta alimentos como la cebolla, los plátanos, cebolla, ajo, pimientos… todos estos ayudan a que circule mejor tu organismo.
3.- Fumar
No solo matan tus pulmones, sino también tu vida en la cama. El cigarro puede llevar a la disfunción debido a los problemas hormonas que causa, derivados de desequilibrios hormonales y deficiencia de testosterona.
Si necesitabas más excusas para dejar el cigarro, no hay mejor que ésta.
4.- Piercings
Bueno, esto es bastante obvio pero vale la pena mencionarlo. Aunque esté de moda y creas que es cool ponerte un piercing ahí (a pesar de que nadie lo va a ver a menos que lo presumas y te veas raro), las probabilidades de que se te infecte son enormes.
Claro, habrá gente que dirá que exageramos, que a ellos no les pasó nada; ojo: son la minoría. Es ridículamente fácil que algo se infecte ahí abajo, así que mejor evita el riesgo a toda cosa.
Y hablando de infecciones…
5.- No usar condón
Es en serio: estamos en el 2015 y hay gente que todavía no usa condón. Que porque están caros, o que su religión lo prohíbe, o la clásica “no se siente lo mismo”; tenemos una respuesta para todas esas objeciones: no hay peor vista que la de tu miembro lleno de ronchas, manchas y dolor al orinar.
Pero si insistes en que lo quieres “naturalito”, allá tú: las infecciones también son muy naturales.
6.- Jalarle el pescuezo al ganso… y matarlo
A veces te dan ganas…bueno, SIEMPRE te dan ganas y es inevitable. Sin embargo, hacerlo de forma agresiva, o peor aún, forzarlo, puede llevar a que tu miembro se doble de una manera nada atractiva y muy peligrosa.
No es tan usual, pero una fractura es posible, así que… ¿por qué no lo tratas con amor?
7.- Que el sol no te quite las ganas
Después de estar mucho tiempo bajo el sol incandescente no tenemos ganas de hacer nada, y eso disminuye el deseo… y por lo tanto la capacidad de tu miembro para levantarse y en general desempeñarse como debe.
Así que ya sabes: menos bronceado y más acción.
Nuestro cuerpo está conectado en su totalidad, y si una parte está mal todo lo demás también. Y cuando esa parte es tu amiguito, su infelicidad es tu infelicidad: no dejes que suceda. ¡Dale
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